martes, 10 de septiembre de 2013

Historia (II). La independencia de la India y la época dorada

El estallido de la Segunda Guerra Mundial provocó un gran impacto en la industria cinematográfica. Como colonia británica, India se vio envuelta en el conflicto cuando el Reino Unido le declaró la guerra a Alemania. La escasez de productos básicos provocó la aparición de un próspero mercado negro, cuyos beneficios empezaron a invertirse en la producción de películas. Como resultado, tanto los presupuestos como los salarios de los actores se dispararon. La entrada de capital provocó el cierre de la mayoría de estudios, incapaces de igualar las cifras, y el ascenso de la figura del productor independiente, una de las características de la industria de Bombay en la actualidad.
La victoria aliada en la Segunda Guerra Mundial dio lugar a la intensificación de las demandas a favor de la Independencia de la India. Los líderes nacionalistas destacaban la hipocresía que mostraba el Reino Unido al mantener sus colonias mientras luchaba contra Alemania y Japón en favor de la democracia y la libertad. India finalmente se deshizo del dominio británico en Agosto de 1947, pero con la independencia se produjo la división de la colonia en los estados de India y Pakistán y la migración de millones de personas a través de sus nuevas fronteras. Se calcula que entre 10 y 15 millones de personas se desplazaron en un período de dos meses, y cerca de un millón murieron por el camino a causa de las confrontaciones entre diferentes grupos, sobre todo en el Punjab y Bengala, estados que fueron divididos. Las industrias localizadas en Calcuta (Bengala) y Lahore (Punjab) fueron las más afectadas ya que ambas perdieron personal y espectadores.

Izquierda: Nehru, Mountbatten y Jinnah negociando los términos de la independencia
Derecha: miles de ciudadanos cruzando la frontera

La industria cinematográfica en Hindi, por el contrario, se benefició del debilitamiento de estas industrias y de la afluencia de gente que abandonó Pakistán y se instaló en ciudades como Bombay y Delhi. El posterior desarrollo de la industria en Bombay está marcado por estos hechos; muchos de los actores, productores, directores y demás trabajadores emigraron a Bombay desde Pakistán o son descendientes de personas que lo hicieron. El predominio actual de punjabíes es también consecuencia de esta historia, y la cultura punjabí ha pasado a considerarse la cultura nacional de la India.
Por otro lado, después de la Partición Bombay se convirtió en uno de los pocos lugares donde el urdu se conservó. El urdu se convirtió en el idioma oficial de Pakistán, a pesar de ser originario del norte de la India. Las tensiones políticas entre los dos nuevos estados y la asociación del urdu con el Islam llevaron a la promoción del hindi como idioma nacional y la marginalización del urdu. Sin embargo, las películas continuaron haciéndose en hindustani y muchos poetas que escribían en urdu trabajaron como letristas de canciones para películas. La industria cinematográfica de Bombay se convirtió en uno de los lugares donde los musulmanes no eran un grupo menor, sino que gozaban de cierto éxito. Algunos de los actores y actrices más importes han sido musulmanes, igual que muchos directores, guionistas, coreógrafos, letristas y compositores. Es tal vez uno de los ambientes menos segregados a nivel religioso en la India hoy en día, donde hindús y musulmanes trabajan juntos.
En su libro Bollywood: a guidebook to popular Hindi cinema, Tejaswini Ganti divide el período posterior a la independencia de la India en tres fases, que corresponden a tres acontecimientos importantes que han condicionado la evolución política y social de la India. La primera fase está condicionada por la independencia y el proceso de creación del nuevo estado y su economía. La segunda fase se sitúa en la década de los setenta, período de inestabilidad política y descontento popular que culminó con el estado de emergencia declarado por el gobierno de Indira Gandhi en 1975. La última fase se caracteriza por la liberalización económica iniciada en 1991 y la creciente competencia de la televisión.
Aunque celebrada por la mayoría de la población, la independencia de la India dejó paso a la preocupación entre los miembros de la industria cinematográfica, principalmente por el tratamiento que recibían desde el nuevo gobierno. En un país donde la tasa de alfabetización era del 18%, la esperanza de vida era de 26 años, que sufría una grave crisis alimentaria y donde más de una millón de refugiados debían ser reubicados, el entretenimiento no era una necesidad importante. El desarrollo económico y una rápida industrialización eran las principales prioridades del nuevo gobierno. Por otra parte, debido a la escasez de cemento y otros materiales de construcción la construcción de nuevos edificios se limitó a los más esenciales, de manera que la construcción de nuevos cines se prohibió en muchos estados. Las repercusiones de esta medida todavía son evidentes hoy en día. A pesar de ser el mayor productor de películas del mundo, la India sólo tiene 12,900 salas de cine (para una audiencia anual de aproximadamente 5 billones de espectadores), y un índice muy bajo de cines en relación a su población: sólo 13 salas por cada millón de personas, mientras que el Reino Unido tiene 30 por cada millón y Estados unidos 117.
Otra de las dificultades a la que los cineastas tuvieron que hacer frente fue la censura, que lejos de relajarse, se volvió mucho más estricta después de la independencia. Fue una época de intenso debate sobre la creación de una cultura “auténticamente india”, y tanto la música como el baile de las películas fueron objeto de muchas críticas, ya que se consideraba que estaban excesivamente influenciados por la cultura occidental.

A pesar de todas estas dificultades, las décadas de los cincuenta y los sesenta se consideran la época dorada del cine en hindi. Este período vio la emergencia de algunos de los directores más respetados como Raj Kapoor, Mehboob Khan, Guru Dutt y Bimal Roy, y el éxito de estrellas como Nargis, Madhubala, Dilip Kumar y Dev Anand.
Después de la independencia, inmigrantes de las zonas rurales se trasladaron a las ciudades en busca de trabajo. La ciudad se convirtió en sinónimo de empleo y riqueza, pero también proliferó la explotación y el crimen. Algunos directores se centraron en las dificultades de la vida urbana y en sus películas retrataron el lado sórdido de la ciudad escogiendo a ladrones y otros criminales como protagonistas, aunque el optimismo y la posibilidad de una vida mejor siempre estaban presentes. Los problemas a los que tenían que hacer frente los protagonistas eran principalmente de tipo social y económico. Prestamistas, zamindars (terratenientes rurales) y empresarios adinerados y codiciosos era los villanos en muchas películas, mientras que campesinos y trabajadores eran los héroes.
Durante esta época también proliferó la producción de películas con un alto sentimiento patriótico. En consonancia con la idea de “integración nacional” que se promovía desde el gobierno, las películas de esta época destacaban la unidad de la nación india a pesar de su enorme diversidad étnica, lingüística y regional.

Izquierda: Raj Kapoor en Shri 420
Derecha: Nargis en Mother India

En el último capítulo del mi serie sobre la historia del cine en hindi abordaré los cambios que se produjeron durante la década de los setenta y la evolución del cine de Bombay hasta la actualidad.

PD: La canción Awara Hoon de la película Awara  (1951) es un ejemplo de ese mensaje optimista que predominaba en las películas de la época. Dedicaré un artículo completo a esta película y a su director más adelante, pero por el momento os dejo con esta canción, un retrato del protagonista típico de la época, un ladrón de poca monta que sueña con un futuro mejor. Más abajo dejo la traducción (aproximada) al castellano.


Soy un vagabundo
O soy una estrella del cielo en rotación
Soy un vagabundo
No tengo familia, no tengo hogar
No tengo a nadie que me quiera
No tengo a una amante esperando al otro lado del río
La ciudad está vacía para mí, el camino desconocido es todo lo que quiero
Soy un vagabundo
O soy una estrella del cielo en rotación
No estoy asentado, estoy destrozado
Pero canto canciones de alegría
Mi pecho está lleno de heridas
Pero mis ojos ríen
Ooh mundo, tus flechas o el destino me ha golpeado
Soy un vagabundo
O soy una estrella del cielo en rotación

sábado, 3 de agosto de 2013

Historia (I). De los inicios a la llegada del sonido

Como adelanté en el último artículo, en este post empezaré un repaso sobre la historia del cine indio desde sus inicios hasta la actualidad. Sin embargo, voy a dividirlo en varios artículos para que no sea demasiado largo. Así pues, este artículo se centrará en las primeras décadas del cine en la India y la aparición del cine sonoro.

Cine mudo: Phalke

La introducción del cine en la India se remonta a sus orígenes. Las primeras películas de los hermanos Lumière se proyectaron en Bombay el 7 de Julio de 1896, pocos meses después de su exhibición en París. El acontecimiento se anunció en el periódico Times of India como "The marvel of the century; the wonder of the world" (La maravilla del siglo; la maravilla del mundo), y sólo Europeos asistieron a la primera proyección ya que el hotel donde se realizó prohibía la entrada a indios. En proyecciones posteriores abiertas a indios el éxito fue increíble, y fotógrafos autóctonos empezaron a comprar cámaras y hacer sus propias grabaciones. Bombay pronto emergió como el centro de producción más importante. Bombay no era una ciudad indígena, sino que fue desarrollada en el siglo XVII por la Compañía Británica de las Indias Orientales, y pronto se convirtió en la principal ciudad comercial de la India británica. El status de Bombay como capital económica favoreció el florecimiento de la industria cinematográfica ya que resultaba más fácil encontrar la inversión necesaria, pero la ciudad era también el centro del teatro Parsi, movimiento teatral promocionado por comerciantes Parsis, la comunidad de comerciantes mayoritaria de la Presidencia de Bombay. De hecho, Parsis desempeñaron un papel fundamental en el desarrollo económico y cultural de Bombay, y las compañías de teatro proporcionaron los primeros intérpretes y escritores ya que casi todos se pasaron al cine.


Phalke y el anuncio de su película Raja Harishchandra

Uno de los pioneros del cine en India fue Dhundiraj Govind Phalke (1870-1944), más conocido como Dadasahed Phalke, considerado el “padre del cine indio”. Aunque empezó su carrera como fotógrafo, Phalke pronto se interesó por el cine después de ver La vida de Cristo en 1910, y tuvo la idea de hacer películas con dioses hindús. Su primera película, Raja Harishchandra (Rey Harishchandra), se estrenó en 1913 y se convirtió en la primera película india. La película está basada en un fragmento del poema épico Mahabharata, que cuenta la historia de un rey que pierde a su familia y su reino. La película fue un éxito e inauguró el género “mitológico”, que plasma historias sobre dioses y diosas hindús. Muchas de las películas producidas durante los primeros años estaban basadas en historias popularesy obras de teatro conocidas, de manera que la experiencia resultaba más familiar para los espectadores. La ausencia de sonido se solucionó con la introducción de música en directo. Al igual que en otros países, un pequeño grupo de tres o cuatro músicos tocaba música durante la proyección de la película. La música variaba según la escena, creando diferentes efectos sonoros. Así es como el sonido se “incorporó” al cine mudo.
A pesar del éxito de su primera película, la carrera de Phalke acabó fracasando y éste murió en 1944 arruinado y olvidado. Su contribución sólo fue reconocida años después, cuando el premio Dadasaheb Phalke fue creado en 1966, el cual se otorga a personalidades que han realizado una contribución significativa a la industria cinematográfica de la India.
La creciente rentabilidad del cine permitió a directores y productores reinvertir sus beneficios en nuevos proyectos e infraestructuras, como estudios, laboratorios y teatros. En 1925, Bombay se había convertido en la capital del cine de la India.

La llegada del cine sonoro: Alam Ara

Alam Ara se estrenó el 14 de Marzo de 1931, pasando a la historia como la primera película sonora del cine indio. Esta película, dirigida por Ardeshir Irani, incluía siete canciones, de manera que música y baile se convirtieron en características esenciales del cine indio. La película fue un éxito rotundo y otros trataron de repetirlo incluyendo números musicales en sus producciones. La práctica se llevó al extremo en algunos casos; la película Indrasabha (1932) tiene el récord con setenta canciones.

Master Vithal y Zubeida en Alam Ara

La incorporación del sonido generó algunos problemas, como el idioma. En India se hablan muchos idiomas, y Bombay era una ciudad políglota, de manera que los cineastas de la ciudad tuvieron que decidir en qué idioma producir sus películas. Hindi era el idioma que ofrecía mayores posibilidades, ya que una gran parte de la población hablaba alguna de sus versiones. También tuvieron que escoger qué dialecto, ya que el idioma varía según la región. Finalmente, cineastas se decidieron por un tipo de hindi hablado conocido como “hindustani” (una mezcla de hindi y urdu), idioma asociado al comercio que servía como lengua franca en el norte y centro de la India. Así, Bombay se convirtió en la única ciudad donde el idioma de la industria cinematográfica no coincidía con el idioma de la región. Por otra parte, el hecho que el cine en hindi se desarrollara en la plurilingüe Bombay y no en el norte del país donde el hindi es el idioma principal eliminó cualquier identificación regional, de manera que las películas en hindi adquirieron un mayor carácter “nacional”.
La otra consecuencia de la incorporación del sonido era que los actores y actrices debían ser capaces de hablar el idioma requerido además de saber cantar (las canciones se grababan al mismo tiempo que la imagen), de manera que las mujeres anglo-indias que habían dominado la escena ya no servían, ya que estaban poco familiarizadas con el idioma. En los inicios del cine indio la mayoría de mujeres no estaban dispuestas a actuar ya que estaba asociado con prostitutas y cortesanas, fuera de los límites de la sociedad decente. En Raja Harishchandra los personajes femeninos estaban interpretados por hombres. Cuando mujeres empezaron a actuar en películas en los años 20, muchas eran de origen británico o europeo, comúnmente conocidas como anglo-indias. Debido a su origen estas mujeres estaban menos limitadas por convenciones sociales. El teatro se convirtió en la mayor fuente de actores y actrices. También descendientes de la tradición cortesana en la India se unieron a la industria cinematográfica.
La introducción de la técnica del playback (grabar una canción previamente y hacer que el actor sincronice sus labios con la letra) en 1935 revolucionó la industria. Ya no era necesario que los actores supieran cantar y la grabación de las secuencias musicales resultaba más sencilla al no tener que grabar la canción simultáneamente. La música se convirtió en una importante herramienta de promoción ya que podía lanzarse al mercado antes del estreno de la película. El playback se convirtió en una práctica aceptada y dio lugar a la aparición de la figura del cantante de playback. Figuras como Mukesh, Kishore Kumar y Lata Mangeshkar dominaron la escena musical durante décadas.


En el próximo artículo abordaré la evolución de la industria cinematográfica durante la Segunda Guerra Mundial y la independencia de la India, así como la década de los años cincuenta, considerada como la década dorada del cine indio.



miércoles, 3 de julio de 2013

Primeros apuntes

En esta primera entrada mi intención es aclarar algunos aspectos acerca del cine comercial indio, popularmente conocido como Bollywood.
El término "Bollywood" es ampliamente utilizado para referirse al cine en Hindi que se produce en Mumbai (antes Bombay). A veces se emplea incorrectamente para describir el cine indio en su totalidad, pero en India existen otros centros de producción donde se realizan películas en otros idiomas. Sin embargo, a pesar de ser un término popular también es bastante controvertido, y muchas personas dentro y fuera de la industria rechazan su uso.
Como se puede deducir fácilmente, el término proviene de la combinación de las palabras Bombay y Hollywood. Creado por la prensa en lengua inglesa de la India a finales de los años 70, algunas personas consideran que es un nombre peyorativo, ya que otorga a la industria india un estatus de subordinación respecto a la industria americana. La industria del cine de Bombay es estéticamente y culturalmente distinta de Hollywood, aspectos que analizaré a lo largo de próximos artículos. Asimismo, no tiene sentido referirse a las películas producidas en los años 50 y 60 como Bollywod dado que el término surgió posteriormente.
Aunque el término Bollywood prevalece en la esfera popular, otros círculos apoyan el uso de otros nombres. El más utilizado en el mundo académico de habla inglesa es "Hindi cinema", que emplea el idioma como principal característica. Sin embargo, este término también resulta algo problemático, ya que los guiones cada vez contienen más diálogos en inglés.
Un error común entre la prensa internacional es la afirmación que la industria de Bombay produce 800-1.000 al año. En realidad, Mumbai produce entre 150 y 200 películas al año. En India se producen películas en aproximadamente 20 idiomas distintos, y además de Mumbai existen otros importantes centros de producción. Todo este conjunto convierte a India en el mayor productor de películas del mundo. A pesar de constituir el veinte por ciento de la producción total, las películas en Hindi son las que más circulan a nivel nacional y también internacionalmente, de manera que constituyen el modelo de lo que se entiende por cine indio.
Otro estereotipo habitual acerca de estas películas es que carecen de género o que varios géneros se combinan en una sola película. Esta percepción radica en la concepción que los géneros que podemos encontrar en películas europeas o americanas son universales, atemporales y absolutos. En referencia al cine, el género se puede definir como la combinación de las expectativas y las hipótesis que los espectadores tienen mientras ven una película. De este modo, tiene sentido que alguien que no esté familiarizado con el cine indio se sienta desconcertado ya que sus expectativas se han desarrollado al ver otro tipo de películas. Alguien que nunca haya visto una película india puede que considere que los cambios de escena o la introducción de números musicales no tengan sentido, mientras que los espectadores acostumbrados a este tipo de películas lo consideran una característica habitual. El cine indio tiene sus propios géneros (mitológico, devocional, reencarnación), aunque también incorpora otros géneros universales como las películas de acción o las comedias románticas. Aunque casi todas las películas comerciales indias incluyen canciones, la categoría de "musical" sólo se suele utilizar para referirse a películas sobre música, músicos o actuaciones musicales. Desde el punto de vista de los espectadores "musical" es una categoría irrelevante.

En mi próximo artículo y como conmemoración del centenario del cine indio, haré un breve repaso a la historia y las distintas fases que la industria cinematográfica ha experimentado. Espero vuestros comentarios y vuestras sugerencias para próximos artículos.


¡Bienvenidos!

¡Bienvenidos a mi blog! Después de mucho tiempo meditándolo he decidido abrir este blog por diversas razones. Me apasiona la historia y la cultura indias (de hecho, me vine a Londres para poder estudiar en una de las universidades más importantes especializadas en el tema), y sobre todo me gusta el cine indio, como  fuente de entretenimiento pero también como instrumento de estudio de la sociedad y la cultura indias.
En los últimos años el cine indio se ha hecho popular en España, y también tiene muchos fans en algunos países de Sudamérica. Son muchos los factores que han contribuido a la internacionalización de la industria cinematográfica india. Internet ha permitido que películas realizadas a miles de kilómetros sean accesibles en países en los que éstas no se comercializan de manera tradicional. La comunidad india establecida en España también ha contribuido a la difusión de la cultura india, y ya son muchas las academias/escuelas en las que cualquiera puede sumergirse en la cultura india a través de su música y sus bailes.
A pesar de esta popularidad, la disponibilidad de información académica en español sigue siendo limitada, ya que la mayoría de libros e información sólo están disponibles en inglés. Mi propósito en este blog es ofrecer un punto de vista diferente acerca del cine indio. Pretendo proporcionar información académica sobre películas, actores y directores, además de una mirada crítica sobre una de las mayores industrias cinematográficas del mundo.
Mi deseo es crear una guía a través de la cual el lector pueda adentrarse en el universo del cine indio. El blog incluirá análisis de películas y artículos sobre directores y actores considerados parte esencial de la historia del cine indio, así como monográficos sobre temas concretos.
Poco más que decir. !Espero que os guste! Shukriya.